

El Derecho de la propiedad es una de las especialidades de Aestimatio Abogados desde hace más de veinte años. Por eso sabemos bien que la convivencia en una comunidad de propietarios puede ser una experiencia gratificante o una pesadilla, dependiendo de la capacidad de los vecinos para gestionar los conflictos de manera adecuada.
Muchas veces es necesario recurrir a terceras personas imparciales que logren mediar entre las partes. Pero existen una serie de pautas claves que pueden ayudar a solucionar los problemas. Es muy importante tener en cuenta que cada comunidad de propietarios tiene su propia personalidad y dinámica, por lo que no existe una solución única para todos los conflictos.
Estos, además, pueden tener múltiples causas: ruidos, morosidad, desperfectos, mascotas molestas, malos olores, etc. Estas situaciones pueden generar un clima de malestar y tensión que afecta a la convivencia y al bienestar de todos los residentes. Sin embargo, hay algunas estrategias generales que pueden ayudar a resolver la mayoría de los problemas.
Comunicarse de manera clara y conocer las normas
En primer lugar, como en casi cualquier aspecto de la vida, la comunicación es clave. Si un vecino tiene un problema con otro, la primera estrategia debería ser hablar directamente con la persona involucrada. A veces, un malentendido puede ser la causa del conflicto, y una conversación honesta y abierta puede ser suficiente para resolver el problema. Si esto no surte efecto, se puede recurrir a un mediador para ayudar a facilitar la comunicación y encontrar una solución.
También es relevante que los vecinos conozcan las leyes y normas que rigen la convivencia en la comunidad de propietarios. Si un vecino está infringiendo las normas o causando molestias a otros propietarios, se puede recurrir a la comunidad para hacer cumplir las normas y tomar medidas, protegiendo así los derechos de los demás propietarios.
Para ello, la comunidad debe ajustarse a la normativa. Esto implica tener un libro de actas, un registro de propietarios, unos estatutos y unas normas de régimen interno que regulen el funcionamiento y los derechos y obligaciones de cada uno.
También se debe contar con un administrador de fincas profesional que se encargue de llevar las cuentas al día de modo transparente, convocar las reuniones, gestionar los servicios comunes y asesorar en caso de duda o conflicto.
Un abogado especializado en Propiedad horizontal puede mediar en el conflicto
El mejor lugar para tratar de resolver los problemas o conflictos entre vecinos es en las juntas de la comunidad, que deberían celebrarse al menos una vez al año. Si las cosas se ponen demasiado tensas, puede ser necesario recurrir a la ayuda de un abogado especializado en derecho de la propiedad para ayudar a mediar el conflicto.
No se puede pasar por alto que la solución ideal es aquella que satisface a todas las partes involucradas. A veces, es necesario ceder en algunas cosas para llegar a un acuerdo que funcione para todos. Es importante mantener una mente abierta y estar dispuesto a escuchar a los demás. La mediación puede ser una buena solución.
Es un procedimiento voluntario, flexible, confidencial y participativo, dirigido por un profesional imparcial que ayuda a las partes implicadas a llegar a acuerdos de forma constructiva y beneficiosa para todos, potenciando su capacidad de diálogo y comunicación. La mediación es una solución rápida, económica y satisfactoria de resolver los conflictos entre vecinos sin deteriorar las relaciones ni generar más problemas.
Como abogados de Propiedad Horizontal, desde Aestimatio Abogados estamos preparados para poner nuestra experiencia y buena disposición a la hora de gestionar los conflictos entre vecinos en una comunidad de propietarios. ¡Contáctanos!